El pasado trimestre nos embarcamos en la aventura de organizar un viaje en un tiempo record para que los alumnos asistiesen a un encuentro en San Sebastián de Ciudades destruidas por las guerras. Este encuentro está relacionado con la capitalidad de San Sebastián de ciudad cultural en el 2016 y uno de de los temas prioritarios es la Paz.
El IES Gustavo Adolfo Bécquer lleva ya tres años trabajando en este tema a través de las historias que recogen los alumnos de sus abuelos, de sus padres o de personas ancianas que conozcan el pasado. Si bien es verdad que ya pocos supervivientes están con nosotros, hemos reunido historias sorprendentes y los alumnos descubren la historia de su país y de la vida cotidiana de sus mayores de una manera muy viva.
La visita ha sido todo un éxito. Nuestros alumnos y los de otros dos institutos más, el Luis Buñuel de Coslada y el Isaac Albéniz de Leganés, participaron en el Kursaal con ponentes muy importantes de ciudades destruidas como Dresden, Milán o Sarajevo.
La presentadora del evento, que es la directora del Foro por la Paz, Inesa, se mostró muy entusiasmada con la intervención de los alumnos y le sorprendió mucho su soltura en la lectura ante un auditorio tan grande y en un lugar tan imponente como el Kursaal. También le fascinaron los relatos recogidos.
Igual de importante fue nuestra visita al día siguiente a dos centros educativos de San Sebastián, la Ikastola Lauaizeta y el Instituto Usandizaga. De este encuentro entre alumnos han surgido amistades e incluso visitas entre ciudades a nivel particular. Pero lo más relevante fue que los alumnos manifestaron que su visión de «lo vasco» y de “lo madrileño» como elemento conflictivo, había desaparecido. Se sintieron como iguales, afectados por cosas muy parecidas y no como individuos pertenecientes a mundos distantes y contrarios.
Para mí este fue el logro más importante, conocer al otro en su peculiaridad y no como un ente abstracto los políticos Esto constituye el primer para paso para una están en mejor disposición de lograr este objetivo.
Nuestra experiencia como profesoras, la de Filomena Navas y la mía, y la del resto de los profesores que nos acompañaban, fue muy similar.
Conectamos con los profesores, en especial con la directora y la Secretaria de la Ikastola, que nos prepararon una acogida estupenda y muy bien organizada. Las familias nos habían hecho diversos aperitivos para acompañar el encuentro. Nos dimos cuenta de lo común de nuestros problemas y de las diferencias de filosofía educativa y aprendimos mucho.
También vimos cómo el presupuesto en educación y la ratio de alumnos son mucho mejores que los que tenemos en la Comunidad de Madrid y cómo los recortes no son en absoluto del mismo calibre. Esto podría explicar el que tengan una tasa de fracaso escolar que es justo la mitad de la nuestra.
Por último, no puedo dejar de citar el relato de las hormigas que Luis Iriondo, superviviente de Guernica, no relató a propósito del bombardeo.
“Los pilotos de la legión Cóndor que nos bombardearon nos veían como hormigas que corríamos asustadas. Los hombres y las hormigas no pueden hablar. Si nos hubieran visto de cerca a lo mejor no hubiesen tirado esas bombas que nos destruyeron”
Gloria García Molina
